sábado, marzo 24, 2012

Incursión en la joyería

El título me ha salido de corrido. Si uno busca el significado de incursión verá que lo definen como intromisión en una actividad ajena. La intuición ha debido dictarme las palabras, porque, a través del taller de orfebrería, me he adentrado en un mundo ajeno y desconocido. Por lo tanto, fascinante.

Estas son las piezas que, hasta ahora, he hecho.

Estos broches son de latón. Hechos a partir de un modelado y molde previos.


Pendientes en forma de espiral, segueteados de una lámina de cobre.
No me preocupó mucho que fueran iguales, pero tampoco hubiera podido conseguirlo.

Hilos de aluminio plateado y dorado, entrelazados, laminado y doblado.



Hilo de plata anudado varias veces.
Dos piezas de alpaca irregulares, redondeadas. Dejo el oxidado que queda después de calentarlos para soldar el hilo de plata.
Dos cuadrados de alpaca como base y dos semiesferas de lámina de cobre, plegada y redondeada hasta provocar la ruptura. Lógicamente, no se rompen igual ambas piezas.